En su carrera como boxeadora, a María Micheo se le han presentado retos y dificultades que ha tenido que superar para salir adelante.
Uno de esos fue la suspensión de 2 años (de 2015 a 2017) que tuvo que cumplir, debido a que la Federación Nacional de Boxeo no notificó sobre su cambio de un deporte de contacto a otro (de karate a boxeo), tal y como lo exige la Asociación Internacional de Boxeo (AIBA), entidad que rige el boxeo olímpico.
A raíz de dicha suspensión surgió el apodo de "La Imparable":
"El sobrenombre de "La Imparable" se da gracias a que yo nunca me rindo; he tenido muchas dificultades, muchos obstáculos, pero siempre he logrado superarlos con trabajo y buena actitud", dijo.
Agregando que "el apodo genera en mi un recordatorio de estas metas que tengo. No todos los días son buenos, no todos los días hay energía, hay días que tengo mucho cansancio pero mi sobrenombre me hace levantarme y ponerme a trabajar fuerte".
¿Quién te puso el sobrenombre de "La Imparable"?
Lo escogimos en equipo entre Marisol y yo, tomando como base las características en mi vida cotidiana y arriba del ring.
¿Hasta este momento los resultados que has obtenido en tu carrera como boxeadora profesional te hacen ser imparable? Si-No ¿Por qué?
¡Completamente! Nunca nos hemos acomodado a esperar que las oportunidades aparezcan y que nos den facilidades.
Todo lo contrario, las hemos buscado. Me ha tocado invertir en el 100% de mi carrera, y a pesar que siempre han habido dificultades, por falta de apoyo, innovamos, trabajamos y solemos ser creativas para obtener los recursos necesarios.
¿Cuáles han sido las dificultades más grandes a las que te has enfrentado en tu carrera como boxeadora profesional y cómo las has superado?
La etapa más fuerte como deportista fue desde que estuve en el boxeo olímpico. Dependía de una Federación, la cual siempre me cerró el paso, me trataban de destruir y cerrar el paso.
Al conseguir una oportunidad para pasarme al profesionalismo y volvernos independientes, nos encontramos con muchas limitantes, ya que en Guatemala no había boxeo profesional cuando empezamos.
No teníamos mayor conocimiento y nos toco estudiar muchísimo para poder ir mejorando. Somos dos mujeres representando a un país en un deporte en donde sobresale el machismo.
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